26 enero, 2011

extraños enamorados..."Los amorosos"

Dejare de pensar, para escribir q...

el amor llega a la vida de la gente de una y mil maneras, cuando menos lo esperamos y como menos lo imaginamos...
asi es...

algunos son amores reciprocos, q entregan lo mismo q nosotros...
otros son amores desiguales, q nos tienen dando de mas...
unos cuantos son amores suicidas, aquellos q mueren al caer la noche y renacen al amanecer...
otros son amores indesisos, nos aman hoy y mañana no, talvez nos amaran de nuevo pasado mañana...
ahi amores rosas q todo el tiempo es dulce y miel, alegria y felicidad...

y bueno no todos los amores son sanos, algunos son enfermizos...

Alguna vez han leido "Los amorosos" de Jaime Sabines?

Los amorosos callan.
El amor es el silencio más fino,
el más tembloroso, el más insoportable.
Los amorosos buscan,
los amorosos son los que abandonan,
son los que cambian, los que olvidan.

Su corazón les dice que nunca han de encontrar,
no encuentran, buscan.
Los amorosos andan como locos
porque están solos, solos, solos,
entregándose, dándose a cada rato,
llorando porque no salvan al amor.

Les preocupa el amor. Los amorosos
viven al día, no pueden hacer más, no saben.
Siempre se están yendo,
siempre, hacia alguna parte.
Esperan,
no esperan nada, pero esperan.

Saben que nunca han de encontrar.
El amor es la prórroga perpetua,
siempre el paso siguiente, el otro, el otro.
Los amorosos son los insaciables,
los que siempre -¡que bueno!- han de estar solos.
Los amorosos son la hidra del cuento.

Tienen serpientes en lugar de brazos.
Las venas del cuello se les hinchan
también como serpientes para asfixiarlos.
Los amorosos no pueden dormir
porque si se duermen se los comen los gusanos.
En la oscuridad abren los ojos
y les cae en ellos el espanto.
Encuentran alacranes bajo la sábana
y su cama flota como sobre un lago.

Los amorosos son locos, sólo locos,
sin Dios y sin diablo.
Los amorosos salen de sus cuevas
temblorosos, hambrientos,
a cazar fantasmas.
Se ríen de las gentes que lo saben todo,
de las que aman a perpetuidad, verídicamente,
de las que creen en el amor
como una lámpara de inagotable aceite.

Los amorosos juegan a coger el agua,
a tatuar el humo, a no irse.
Juegan el largo, el triste juego del amor.
Nadie ha de resignarse.
Dicen que nadie ha de resignarse.
Los amorosos se avergüenzan de toda conformación.
Vacíos, pero vacíos de una a otra costilla,
la muerte les fermenta detrás de los ojos,
y ellos caminan, lloran hasta la madrugada
en que trenes y gallos se despiden dolorosamente.

Les llega a veces un olor a tierra recién nacida,
a mujeres que duermen con la mano en el sexo,
complacidas,
a arroyos de agua tierna y a cocinas.
Los amorosos se ponen a cantar entre labios
una canción no aprendida,
y se van llorando, llorando,
la hermosa vida.






Es un gran poema, con tanta realidad y fantasia x aplicar... es uno de mis favoritos y ni asi e podido aprendermelo... me parecio q mis pqños amigos extraños y enamorados iban muy bien con el poema...
me parecio mas q nada q su amor era amor mundial, ya saben, uno de esos q te comparte un poco cuando los conoces, te dan su sonrisa y un calor abundante, te dan un abrazo y dejan en ti plantado un dulce aroma a sinceridad...
adoro a esa parejita tan dulce...


Buenas lunas...

1 comentario:

  1. que auténticos! El dibujo de la furgo de debajo me encantaaaa!

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